“La alta costura es uno de los últimos refugios de lo maravilloso, y los diseñadores los últimos poseedores de la varita de la hada madrina de Cenicienta”.
Christian Dior
“Cuando la maison Christian Dior abrió por primera vez, el hôtel particulier situado en el número 30 de la avenue Montaigne contaba con tres ateliers, un estudio diminuto, un salón en el que se mostraban los vestidos, un camerino para las modelos, un despacho y seis pequeños salones de pruebas”, contaba Monsieur Dior en sus memorias. La Galerie Dior, ubicada en este “refugio de lo maravilloso”, es un testimonio de la creatividad de Christian Dior y sus sucesores, Yves Saint Laurent, Marc Bohan, Gianfranco Ferré, John Galliano, Raf Simons, Maria Grazia Chiuri y Jonathan Anderson.
Estas paredes han sido testigo de la creación de las colecciones de la maison Dior durante casi 80 años, comenzando con el New Look, un momento revolucionario en la historia de la moda. Esta silueta, bautizada por Carmel Snow, jefa de redacción de la revista estadounidense Harper’s Bazaar, tras la presentación del primer desfile de Dior el 12 de febrero de 1947, representa la actitud de una mujer que reivindica su feminidad en el periodo de reconstrucción después de la Segunda Guerra Mundial.
La Galerie Dior captura el espíritu de la alta costura parisina y perpetúa la memoria de esta dirección histórica por medio de una colección de looks, bocetos originales y documentos de archivo, así como accesorios y piezas excepcionales.
LA COLECCIÓN DIOR DE AZZEDINE ALAÏA
La Galerie Dior y la Fondation Azzedine Alaïa presentan una doble exposición exclusiva en honor a Azzedine Alaïa (1935-2017), coleccionista y admirador de Christian Dior.
Los vestidos de Monsieur Dior fascinaron a Azzedine Alaïa desde su juventud: los descubría en las revistas y los dibujaba en un intento por entender su técnica. En 1956, dejó su Túnez natal para formarse como diseñador de moda en Francia. Al llegar a París, se incorporó al equipo de Dior, donde se sumergió en el ambiente efervescente de una Maison que se preparaba para presentar su colección pocas semanas después. Aunque su paso por la firma fue breve, nunca olvidó esos vestidos que parecían “mantenerse de pie solos”, ni el exigente trabajo de los ateliers situados en el número 30 de la avenue Montaigne.
Azzedine Alaïa, diseñador famoso por su dominio de la sastrería, se convirtió rápidamente en un sagaz coleccionista de moda. A finales de la década de 1960, en absoluto secreto, comenzó a componer una importante colección patrimonial que reflejaba el arte de sus predecesores, en la que Dior ocupa un lugar especial, como muestran las 600 piezas que conserva la Fondation Azzedine Alaïa. Más de cien de estas creaciones, identificadas y documentadas gracias a la valiosa colaboración de Dior Héritage, se muestran por primera vez en La Galerie Dior para poner de manifiesto la admiración que el diseñador profesaba por Christian Dior y sus sucesores, desde Yves Saint Laurent hasta John Galliano.
La exposición, que forma parte de la colección de Azzedine Alaïa, explora tanto los gustos del modisto fundador como los elementos emblemáticos de su estilo: la creación de la línea, los suntuosos tejidos y su variada paleta de colores, las técnicas subyacentes a la arquitectura de los looks, y el equilibrio de un armario que puede lucirse del día a la noche.
En paralelo, la Fondation Azzedine Alaïa presenta una exposición especial en su sede de París, dedicada a la obra de estos dos maestros de la costura. Alrededor de treinta looks de Christian Dior, escogidos por Azzedine Alaïa y exhibidos junto con un número similar de sus propias creaciones, demuestran en qué medida su propio arte se vio influenciado por el inventor del New Look.
Esta doble exposición ofrece una nueva visión de la historia de Dior a través de un modisto coleccionista, al tiempo que revela una serie de cautivadoras correspondencias entre Christian Dior y Azzedine Alaïa.